Ayer fue un día lleno de cosas inesperadas, un día largo, cansado con un sol tremendo que te ´produce insolación; pero demasiado e inmensamente feliz. Ayer me fui a Arica; de pura casualidad para hacerle el favor de la VISA a una amiga mexicana. Estuve feliz de ver y encontrarme por unas horas con mi amigos, pero a la regresada de casualidad me encontré con mi ex suegro al cual le pregunte algo sin saber quien era. Y al llegar a mi casa me di cuenta que era el papa de Gustavo. En fin no se que sucederá ahora; solo te quiero olvidar. Me hace mucho daño recordarte...
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